Proclamación de Trump limita el acceso desde África y Asia, exceptuando a residentes legales en EE. UU.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, oficializó una nueva proclamación que expande las restricciones de ingreso para ciudadanos de más de treinta naciones, fundamentada en criterios de seguridad nacional, prevención del terrorismo y deficiencias en los protocolos de verificación migratoria extranjeros.
La normativa, emitida por la Casa Blanca, endurece las limitaciones vigentes al incorporar nuevos estados a la lista de restricción absoluta, ajustar los controles para visados temporales y limitar el acceso a portadores de documentos de la Autoridad Palestina debido a la imposibilidad de realizar auditorías de identidad confiables en zonas de conflicto.
Países con restricciones totales y nuevos integrantes
La orden ejecutiva ratifica la suspensión definitiva de entrada y emisión de visados para nacionales de doce estados calificados como de «alto riesgo», grupo que incluye a Afganistán, Haití, Irán, Libia, Somalia, Siria y Yemen. A esta categoría se suman ahora Burkina Faso, Mali, Níger y Sudán del Sur.
Asimismo, Laos y Sierra Leona, que anteriormente mantenían limitaciones parciales, han sido elevados a restricción completa debido a sus elevados índices de permanencia irregular y a la recurrente negativa de sus gobiernos para procesar la repatriación de ciudadanos deportados desde territorio estadounidense.
La proclamación incorpora a quince naciones adicionales de África y Oceanía —entre ellas Angola, Tanzania, Zambia y Zimbabwe— bajo un régimen de restricción parcial que limita la obtención de visados de no inmigrante, tales como los de turismo, negocios y estudios.
Esta medida se complementa con la continuidad de controles específicos para ciudadanos de Venezuela, Cuba, Burundi y Togo. Según el Departamento de Seguridad Nacional, estas acciones responden a vulnerabilidades detectadas en los sistemas de registro civil de dichos países, la existencia de esquemas de «ciudadanía por inversión» que facilitan el fraude de identidad y la presencia de grupos armados en sus territorios.
Excepciones y criterios de seguridad nacional
A pesar del endurecimiento de la norma, el decreto contempla exenciones puntuales para residentes legales permanentes, diplomáticos, deportistas y titulares de visas emitidas con anterioridad a la fecha de vigencia. No obstante, la administración ha restringido la cobertura de ciertas visas familiares para mitigar riesgos de fraude.
El presidente Trump justificó la medida como un acto necesario para proteger el orden público, señalando que Estados Unidos no admitirá a individuos sobre los que no se disponga de información fidedigna para evaluar su peligrosidad.
Los departamentos de Estado y de Seguridad Nacional mantendrán una revisión periódica de la lista, condicionando el levantamiento de las restricciones a la mejora en la cooperación bilateral y al intercambio de datos biométricos y criminales.
La Casa Blanca enfatizó que esta estrategia, respaldada previamente por precedentes en la Corte Suprema, busca presionar a los gobiernos extranjeros para que adopten marcos legales robustos que permitan el retorno de migrantes inadmisibles y fortalezcan la seguridad fronteriza global.
